Presentación

Sarría es una aldea del Valle Alavés de Zuia, pórtico natural del acceso al Parque del Gorbea. La autovía Vitoria-Altube la limita por el Sur, separándola del núcleo urbano de Murguia, capital del Valle. Está encuadrada por los lados Oeste y Este por los ríos Bayas (el mayor de los que brotan del macizo del Gorbea, que recoge las aguas de su cuenca central) y Ugalde, cauce del Berretín, el segundo de sus montes.

Cumpliendo su condición de acogida a la gran reserva natural de nuestro País, ha recuperado toda la capacidad de sugerencia de su acceso secular, el Puente Blanco, y recobrado un molino y un calero que jalonan la carretera de acceso.

Como anticipándose a este planteamiento, desde hace más de veinticinco años ha potenciado una urbanización progresiva, en muchos aspectos modélica (espléndida plaza en el Centro del pueblo, delimitada evocadoramente por la rústica y cuidada bolera; trazado y asentamiento de las vías de comunicación; recuperación de la ermita enclavada en una de sus vías principales; delimitación de nuevas construcciones; iluminación, señalización en rótulos y paneles) que le conceden una imagen de ciudad-jardín, sin perder en ningún momento la intimidad de su sabor rural.

A las realizaciones llevadas a cabo con apoyos y subvenciones públicas se han unido las inspiradas por la fórmula tradicional de la "vereda", a través de la cual colaboran gratuitamente con sus trabajos los vecinos los sábados por la mañana: transformación de la antigua escuela y casa del maestro en instalaciones para tiempo libre de adultos y jóvenes, que se administran en gestión comunitaria, despachos y salas del Concejo; diseño y pavimentación del entorno del templo parroquial y de los alrededores de la ermita; construcción del cementerio; atención al mantenimiento de las instalaciones públicas; saneamiento y replanteamiento de la vieja alberca...

La multiplicación de las edificaciones y el crecimiento de la población han sido espectaculares: en 1970, época en que se inició definitivamente el abandono de la agricultura, el número de edificios habitados era de 27 con 92 habitantes. Los datos de 2002 son 150 viviendas, con aproximadamente 500 personas.

La ganadería había sido siempre actividad preferente en las familias originales; las normas de la Comunidad Europea sobre la producción láctea restringieron la dedicación al ganado vacuno, y los rebaños ovinos (en algún caso, con fabricación directa de quesos) son ya su último reducto.

La absoluta mayoría de las viviendas son ahora residenciales: en un porcentaje importante, de primera residencia.

Las celebraciones festivas han sido clave de referencia.

Quizás en descenso irreversible la clásica y multitudinaria de Santiago (se centró en el titular de una cofradía por su condición de festivo obligatorio en plena recogida de la cosecha) y en ascenso claro la de San Lorenzo, titular de la parroquia, original y familiar, que cumple "in crescendo" los objetivos de integración de todos los vecinos. Se mantiene la tradición multisecular de la vinculación en la Cofradía de San Antón, con una curiosa cena-subasta en la que se puja por los regalos aportados por los propios asistentes.

Y desde 1974 se impulsa y ofrece el escenario (itinerante a lo largo de más de un Kilómetro) al Cortejo Navideño-Gabón bideko Taldea, una expresión de auto sacramental con danzas y canciones (las básicas, compuestas expresamente por Don Luis de Aramburu), en el que participan hombres y mujeres de todos los pueblos del Valle, y que se han venido presentando ininterrumpidamente, pese a las adversas condiciones climatologicass propias de las tardes-noche del 25 de diciembre, que han contado con la presencia de miles de espectadores. Recibió el año 1993 el premio nacional de la Asociación de Belenistas de España, y lejos de solicitar cuestación alguna, invita al final a todos los asistentes a un cálido refrigerio.